En Jalisco, México, un hombre de entre 25 y 30 años ingresó a una vivienda, aparentemente con la intención de hurtar. No contaba con que el sitio era custodiado por Pirata, un perro de raza pitbull.
Vecinos alertaron a la propietaria de la vivienda ante los desesperados gritos del sujeto. Ella dio aviso a las autoridades, pero al hacer presencia tan solo notaron que el hombre no había sobrevivido a las salvajes mordidas que le propinó Pirata.
“La mujer mencionó que sus vecinos la alertaron, que en el interior de su casa se escuchó una persona pidiendo auxilio.
Fue al lugar y se dio cuenta de que hay una mancha de sangre en la sala. Después llegó al área del patio y se encontró con el hombre tendido con bastantes lesiones en su cuerpo”, relató un policía según el medio ADN40.
El animal fue puesto a disposición de las autoridades, que a su vez lo llevaron a un resguardo de protección animal, donde evaluarán si es peligroso para convivir en sociedad.
Aunque se creó una petición en change.org para pedir que no sacrificaran a Pirata, el funcionario municipal Juan Barragán descartó que se tuviera prevista esa decisión para animal. Sin embargo, la última palabra la tienen las autoridades de control animal.
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