El pasado 7 de julio la reportera publicĂł a travĂ©s de su cuenta de Facebook informaciĂłn sobre una menor que habrĂa sido vĂctima de violencia sexual y posteriormente habrĂa sido asesinada. La denuncia de Herrera aportaba informaciĂłn distinta a la que habĂan entregado las autoridades, quienes señalaban que la niña se habĂa suicidado dos dĂas antes en Puerto Guzmán, Putumayo.
Luego de publicar la denuncia, la reportera recibiĂł una llamada por parte de un oficial de la PolicĂa Nacional, quien le advirtiĂł con un tono intimidante que era de pĂşblico conocimiento que la niña no se habĂa suicidado, pero que Herrera debĂa eliminar la publicaciĂłn para evitar problemas. Ese mismo dĂa, la mamá de la menor le enviĂł una nota de voz a la periodista en la que la recriminĂł por la publicaciĂłn y la amenazĂł: “si usted estuviera aquĂ en este momento yo creo que le meterĂa su par de puños para que aprendiera a ser seria”.
La FLIP expresa su preocupaciĂłn por estos hechos y le solicita a la Unidad Nacional de ProtecciĂłn (UNP) que inicie la evaluaciĂłn de riesgo de la periodista con el fin de implementar las medidas de seguridad adecuadas para proteger su vida y su integridad. Adicionalmente, la FundaciĂłn le solicita a la FiscalĂa General de la NaciĂłn que adelante las investigaciones correspondientes para dar con el paradero de los responsables y llevarlos ante la justicia.
Las sanciones judiciales son un precedente importante que contribuye a disuadir la ocurrencia de nuevas violencias contra la prensa. Sobre esto, la RelatorĂa Especial para la Libertad de ExpresiĂłn de la ComisiĂłn Interamericana de Derechos Humanos ha dicho: “para prevenir la violencia contra periodistas y trabajadores de los medios de comunicaciĂłn es indispensable que el ordenamiento jurĂdico sancione estas conductas de manera proporcional al daño cometido”.
InformaciĂłn de La FLIP
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