La retrasada 4G (Neiva – Santana – Mocoa), dejará al Huila un dolor de cabeza permanente. La ministra de Transporte, Ángela María Orozco Gómez, anunció que al final de la obra serán instaladas cuatro casetas de peaje, una de éstas en jurisdicción del departamento del Huila.
El
anuncio se dio en desarrollo de la última audiencia pública de socialización
del proyecto, a la que asistió la Ministra de Transporte, Ángela María Orozco y
el presidente de la Agencia Nacional de Infraestructura (ANI), Manuel Felipe
Gutiérrez. El punto central de la reunión fue el balance del proceso de cesión
por parte de ‘Aliadas para el Progreso’ a los nuevos contratistas. La buena
noticia es que se espera que a finales de marzo esté culminada la cesión y se
puedan reiniciar los trabajos. La mala noticia es que en el contrato está
estipulada la instalación de cuatro casetas (peajes), una de éstas en
jurisdicción del Huila.
Según
el documento, serán instalados los peajes ‘San Juan de Villalobos’, entre
Pitalito y Villalobos; ‘Mocoa’, entre Villalobos y Mocoa; Urcusique, entre
Mocoa y Villagarzón; y ‘Laberinto’, entre El Hobo y Gigante, en el departamento
del Huila.
El anunció encendió las alarmas en la comunidad residente en el centro y sur del departamento, por las implicaciones económicas que esto traerá para varios sectores de la economía, en especial para el turismo.
La
instalación de un peaje entre estos dos municipios implicaría que para ir de
Neiva a San Agustín tocaría pagar tres peajes, lo que haría más costoso un
recorrido de apenas 221 kilómetros. Para la comunidad de San Agustín sería
negativo por la cantidad de turistas que dejarían de ir y en general por la
enorme afectación a la economía de la región.
El
gobernador Luis Enrique Dussan se pronunció al respecto, indicando que el nuevo
peaje sería un golpe a las débiles finanzas de los huilenses y un gran revés a
la hora de incentivar el turismo. Los parlamentarios del Huila, por su parte,
han estado atentos al proceso de cesión y el reinicio de las obras, pero frente
al anuncio del nuevo peaje, no han sido contundentes.
Los
nuevos contratistas son la firma ‘CCA South América’, filial de la sociedad
china ‘State Construction Engineering Corp. (CSCEC), y MECO, una empresa
constructora de Costa Rica. Con ellos es que el gobierno y nuestros parlamentarios
tienen que entrar a “negociar”, para que, sin detrimento de la calidad del
proyecto, se comprometan a que en territorio huilense no serán instalados más
peajes.
Lo cierto es que, si este punto no se ajusta antes del cierre final de la cesión, el nuevo peaje para el Huila será una realidad irreversible, con todas las consecuencias negativas que esto traerá para la débil y complicada economía huilense.
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