Las sexoservidoras que se ubican en la calle octava entre carreras segunda y tercera en Pitalito, tendrían que asumir algunos compromisos con el fin de mitigar el impacto que existe en esta área comercial del municipio.
Según ha trascendido, las personas que se dedican al comercio
sexual se someterían a controles por parte de las autoridades
en cuanto a requerimientos de salud. Sin embargo; cualquier
hecho que altere la intranquilidad en esta
zona y que cause exhibicionismo sería sancionado.
A través de la secretaría de gobierno e inclusión social, se ha
indicado que los controles buscarán que estas personas no
se constituyan en un problema para la convivencia en la
zona.
No hay comentarios