Los restaurantes de Medellín y Bogotá son algunos de los que
más han resultado afectados por el bloqueo de vías y la subsiguiente escasez de
ingredientes requeridos para su operación.
Este es el caso de Sarem Moreno, administradora de un
restaurante en Medellín, quien detalló cómo el bloqueo de vías ha impedido la
llegada de algunos alimentos y ha encarecido sustancialmente otros.
“Es una situación complicada, porque nosotros intentamos dar
una carta extensa para que el comensal se sienta agradado, pero nos hemos visto
con la necesidad de decir que en el momento no tenemos algún plato”, indicó
Moreno.
Juanita Cobollo, administradora de otro restaurante en la
zona gastronómica de Medellín, fue más allá e hizo un llamado para que las
personas que bloquean vías sean conscientes del daño que están causando en las
diferentes industrias del país.
“A los que están haciendo ese bloqueo, y ese paro: ya es
ahora señores que trabajemos por Colombia y no contra Colombia. Nos tienen
quebrados; la pandemia nos tenía quebrados y ustedes nos están rematando. Están
haciendo que echemos a los empleados que tratamos de sostener durante mucho
tiempo”.
Pero la situación crítica de los restaurantes no es
exclusiva de la capital antioqueña. En Bogotá, los establecimientos gastronómicos
también han sufrido el coletazo de los bloqueos que han impedido la llegada de
ingredientes sencillos e incluso de productos de lujo.
El aguacate, el limón, el pollo, el plátano, el lomo y el
caviar son algunos de los ingredientes que ya están escaseando en lujosos
restaurantes de la capital del país, según La República.
“Con la subida del pollo, hasta hace poco compraba el kilo
de pechuga entre $5.000 y $6.000 máximo, a un buen proveedor, pero esta semana
cuando monté pedido, ese mismo kilo estaba ya en $8.000”, detalló Juan Franco,
chef de un restaurante de la zona gastronómica de Bogotá.
Como bien apuntó Cobollo, el sector restaurantero viene
golpeado desde el comienzo de la pandemia por los cierres y cuarentenas, que
han acabado con miles y han provocado grandes pérdidas de empleos. Un informe
de Acodres, replicado por la Cámara de Comercio de Bogotá en noviembre de 2020,
muestra que 22.000 restaurantes cerraron en el país y se perdieron 320.000
empleos directos durante el primer año de la pandemia.
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