El brutal ataque se registro cuando un grupo de aficionados jugaba billar en un reconocido establecimiento público del centro de Neiva, se vio empañado por el trágico episodio que protagonizó un hombre, con antecedentes penales, al atacar a su expareja sentimental, que trabaja en el lugar como mesera, con un arma cortopunzante.
Según las imágenes que quedaron registradas en la cámara de seguridad de Billares Alhambra, el hombre llegó al establecimiento y sin importarle la presencia de más personas, acorraló a su víctima, más adelante sacó un enorme puñal de su espalda y se lanzó sin piedad hacia ella, agrediéndola en repetidas oportunidades.
Las personas que estaban jugando, le tiraron al victimario identificado como José Hover Parra Arias los tacos y las bolas de billar que encontraron cerca para ayudar a que se alejara de la joven. En ese instante llegaron uniformados de la Policía que lograron capturarlo en flagrancia.
La mujer identificada como Andry Calderón Fierro permanece en la Unidad de Cuidados Intensivos de la Clínica Medilaser recuperándose de una cirugía en la que fue necesario recortarle parte de su intestino delgado debido a las lesiones recibidas.
Amenazas, una tras otra
Los padres de la víctima narraron los caóticos momentos que vivía la joven al lado de Parra Arias que, según afirmaron, la amenazaba constantemente con que si lo dejaba la mataría tanto a ella como a su mamá. Además, aseguraron que Andry había decidido desde el pasado 10 de febrero no continuar con esta ‘tortuosa’ relación y fue allí cuando comenzó la persecución.
Este hecho violento no es el primero al que es sometida la joven, pues su papá aseguró que antes había trabajado en otro billar donde, también, fue agredida por José Hover, en esa oportunidad con un destornillador.
“Ese señor en más de una ocasión ha golpeado a mi hija, siempre con la amenaza de que si lo denuncia nos mata a mí o a la mamá, le hace daño a los niños de ella o se mata él; con esas intimidaciones mi hija siempre guardó silencio, pese a que en más de una ocasión intentó denunciarlo. De hecho existe una denuncia en la Casa de la Justicia, donde se colocó en conocimiento lo sucedido, pero nunca trascendió, porque mi niña guardaba silencio por temor, porque este hombre la tiene amenazada” indicó Dagoberto Calderón.
A esta hora, en el Juzgado Segundo Penal Municipal con funciones de garantías realiza la respectiva audiencia de legalización de captura mientras se define la medida de aseguramiento.
Información de La Nación
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